Nafarroaren Eguna vuelve a reunir a miles de personas durante todo el día de este domingo en Baigorri. A partir de las 9:00 de la mañana comenzaron los primeros movimientos en la Gaineko plaza donde, como todos los años, se instaló un pequeño mercado. Tras el almuerzo en la Ikastola, pasadas las 11:00 de la mañana, daba inicio el desfile que recorrió la calle que une la Gaineko plaza con la plaza de la Iglesia.

Así, media hora más tarde, los participantes de Ortzadar dantza taldea, Otsagabiako dantza taldea, Makilariak, Basaldunak, gigantes de Nafarroa y Baigorri, txistularis, gaiteros, Uztaritzeko txaranga y Ezpela llegaban a la abarrotada plaza en la que el público esperaba para ver sus actuaciones.

Los dantzaris de Ortzadar dantza taldea, que este año cumple 50 años, fueron los primeros en actuar, abriendo el acto con una sagardantza y seguida de otros bailes tradicionales. A estos les siguieron los cuatro gigantes de Tafalla, los makilaris, el Otsagabiako dantza taldea, los gigantes Mattin y Xalbador de Baigorri y los dantzaris de Ezpela.

Además de los bailes, en este acto principal de la jornada también hubo bertsos e irrintzis. Por último, y antes de que los más animados tomasen la plaza para bailar la era y unos jauzis, miembros de Basaizea concluyeron el acto con la lectura del comunicado preparado para la ocasión.

La lectura comenzó resaltando la necesidad de defender el euskera. “No queremos que el euskera pase al segundo plano. Tampoco vamos a permitir que se dé cabida al falso concepto de bilingüismo equilibrado” explicaban.

Por otro lado, aprovecharon el acto para denunciar la mercantilización que están sufriendo tanto el euskera como la cultura en general, así como los pueblos. “Además de convertir nuestra lengua en un producto de marketing y folclorización, quieren meter nuestros pueblos en un museo”. Ante esto, reivindicaron la necesidad de demostrar que “no somos simples productos, sino un pueblo que hace, se organiza y vive”.

Y es que aunque las reivindicaciones principales que se han venido haciendo desde la primera edición del Nafarroaren Eguna sigan ahí, los nuevos tiempos han traído con sí nuevas problemáticas a las que quisieron hacer referencia durante el acto de ayer.

Por eso, también hicieron referencia a los macroproyectos que amenazan “nuestras tierras”, como el caso de Erdiz, así como a los grandes proyectos de viviendas que se plantean. Y es que criticaron que, hoy en día, incluso “el paisaje y la arquitectura se convierten en publicidad”, ya que “se trasladan al exterior para que se conviertan en productos de venta”. En este sentido, “contra las reglas del mercado y para que el pueblo no se convierta en piedra de museo”, hicieron un llamamiento a todos los asistentes para “defender nuestra casa”.

Por último, reivindicaron la necesidad de crear más espacios para fomentar la cultura, “porque la cultura y la lengua son las que nos permitirán construir pueblo”. Por ello, alentaron a todas las personas allí reunidas a crear “espacios cómodos y seguros para nuestro idioma y nuestra cultura”, porque “lo que se cree hoy, seguirá creciendo mañana”.

De esta manera, tras finalizar el acto principal de la jornada, la gente que se había reunido bajo el agradable sol en la plaza de la Iglesia comenzó a dispersarse por las diversas zonas de la localidad. Algunos asistieron a la comida de la Ikastola, mientras que otros se conformaron con unos talos.

Después, la música y el buen ambiente llenaron todos los rincones de Baigorri. Gente de ambos lados de la muga disfrutó de las diferentes elektrotxarangas, txarangas, orquestas y espectáculos de dantza,

Además, los más txikis pudieron divertirse en una zona preparada especialmente para ellos con hinchables, juegos de madera, pintacaras, la actuación del payaso Pontx o de la actuación de circo.

A las 15:00 del mediodía, Amets Arzallus, Xabat Illarregi, Ane Labaka y Miren Amuriza ofrecieron una sesión de bertsos musicalizados con la ayuda de los músicos Eneko Sierra y Beñat Antxustegi. Y más tarde darían comienzo los conciertos. El primero fue el de Kiki Bordatxo, al que siguió el grupo Cumbian Bero para, a las 22:30 de la noche, ceder el puesto al conocido grupo Belako.

Por último y para cerrar la programación de un día redondo, el xiberutarra DJ Uzkuluz se encargó de poner la música que siguió animando la fiesta a partir de la media noche.

De esta manera, Baigorri volvió a celebrar este domingo una fiesta sin fronteras en la que txikis, jóvenes y mayores de diferentes lugares pudieron disfrutar de lo lindo.